EL YOGA, UN GRAN ALIADO PARA LA SALUD Y EL BIENESTAR
Por Sebastian Muzi / Mariel Andrea Marmorato
Conversamos con Mariel Andrea Marmorato, dueña y head teacher de Ser Om Shanti Yoga Studio en Tamarindo, quien nos explica los beneficios de esta práctica ancestral y por qué es tan importante para la vida.
Tamarindo es playa, atardecer, noches de fiesta y un crisol de culturas que enriquece a la ciudad. También Tamarindo es espiritual, en él abundan las clases de yoga, los retiros y las terapias holísticas.
Ello incluye a Ser Om Shanti Yoga Studio, un espacio para relajarse, encontrar paz, armonía y desarrollo personal. Está encabezado por la maestra de yoga Mariel Andrea Marmorato quien tiene una historia bastante especial.
Su currículum no comienza enumerando la cantidad de trabajos ni las decenas de estudios que ha realizado en esta disciplina.
“Mis primeros pasos en el yoga fueron hace 29 años, en un momento de mi vida donde no estaba bien y sentía una necesidad muy vívida de reencontrarme con mí misma. Mis comienzos no fueron motivados por la búsqueda de más flexibilidad o alivio del estrés mental o tensiones físicas. Me acerqué al Yoga buscando aliviar el dolor emocional que sentía y así recuperar la alegría y el sentido de mi vida”, relata a The Tamarindo News la maestra argentina, quien llegó a tierra tica hace 23 años y hoy se especializa en la enseñanza de diferentes estilos de Yoga desde una perspectiva funcional y terapéutica.
El yoga es unión. En el contexto del yoga, esta unión se refiere a la conexión integrada entre el cuerpo, la mente y el espíritu. La práctica busca armonizar estos aspectos de la existencia humana para fomentar el bienestar y la autoconciencia a través de prácticas físicas, de respiración y meditación.
Más y más gente de todas las edades y condición física práctica yoga. Existen cantidad de estilos e intensidades, es solo cuestión de probar para encontrar el que más se adecue a lo que queremos y necesitamos.
“Un día, una amiga me invitó a ir con ella a una clase de yoga. Yo no estaba muy convencida, la propuesta me sonaba bastante aburrida. A mí me gustaba entrenar intenso, pesas, aeróbicos. Además, mi cuerpo era muy poco flexible, entrenaba mucho, elongaba muy poco. La idea de ir a sufrir con los estiramientos me desalentaba,” señala Mariel.
Pero su amiga le dijo que se olvide por un momento de lo físico, que el yoga le iba a servir para calmar su mente y hacer espacio para que el corazón hable. “No sé bien por qué, pero sus palabras resonaron y decidí hacer la experiencia. Desde ese entonces el yoga es mi forma de vida y descubrí algo que se ha transformado en una verdad para mí: en la paz interior se asienta la felicidad”, agrega.
The Tamarindo News (TN): ¿Cuáles son los impactos de la práctica del yoga sobre la salud?
Mariel Marmorato (MM): Los beneficios son realmente muchísimos, tanto a nivel físico como mental y emocional (ver aparte). Además de los más evidentes, hay otros beneficios más sutiles y profundos que llegan “por añadidura. La práctica del yoga aumenta nuestra capacidad de introspección y autoconocimiento, de aceptación de nosotros mismos, de aceptación de “lo que es”. Vivimos tironeados hacia el afuera, identificados con lo que hacemos y con lo que se espera de nosotros. La constancia en la práctica del yoga nos acompaña a volver hacia nosotros, a un estado de paz, de presencia, alegría, sabiduría interior, compasión, equilibrio, transformación y la lista continúa. Todo esto eleva el sistema inmunológico y se traduce en salud. No es poca cosa en un momento donde un alto porcentaje de seres humanos incluyendo niños y adolescentes tienen poca tolerancia a la frustración y gran necesidad de gratificación instantánea.
TN: Entonces hay una perspectiva más amplia de lo que es practicar esta disciplina…
MM: Exacto. Hacer solamente las posturas de yoga no es hacer yoga. La ejecución de posturas físicas en sintonía con una respiración consciente es una pequeña parte de lo que es el yoga, la puntita de un gran iceberg. Yoga es un estado de consciencia y una forma de vivir y ver la vida. Esto es muy interesante: por ejemplo, cuando tus acciones están en concordancia con tu pensamiento y tu sentir, cuando lo que haces lo haces estando presente, con alegría y sin dañar soltando lo que ya no necesitas estás también haciendo yoga. Hacer yoga es vivir con altruismo, compromiso y responsabilidad, desde el amor y la actitud compasiva, sin dañar ni dañarte, sin victimizarte, sintiéndote co-creador de tu realidad, en presencia plena y en resonancia con tu ser, buscando no solo tu felicidad sino la de todos los seres.
TN: ¿En cuánto tiempo se pueden ver resultados?
MM: Varía según las personas, depende de la frecuencia con la que se practica, de la constancia y de la actitud. Los beneficios mentales como la reducción del stress, una mayor consciencia corporal y una sensación general de relajación y de paz interior pueden notarse más rápidamente, aún desde la primera sesión. Las mejoras en la flexibilidad, la movilidad y la fuerza después de algunas semanas de práctica regular. La constancia y la disciplina son claves para experimentar cambios.
LAS ĀSANAS FACILITAN EL AUTOCONOCIMIENTO PROFUNDO
La percepción convencional del yoga suele limitarse a las formas físicas de las posturas (āsanas), pasando por alto su verdadera esencia.
El término sánscrito āsana proviene de los Yoga Sutras de Patanjali, un libro clásico de la filosofía del yoga, donde se describe al āsana como una postura estable y cómoda acompañada por una respiración consciente. Existe una relación profunda entre las posturas y la energía vital que nos nutre (prana).
Más allá de las posturas físicas, el yoga es una filosofía que busca la conexión integral entre cuerpo, mente y espíritu. Las āsanas son herramientas que facilitan el autoconocimiento profundo al enfocarse en la respiración y la introspección. Esta práctica va más allá de lo físico, ofreciendo beneficios mentales y emocionales significativos. La atención plena cultivada durante la meditación y la práctica de āsanas se traduce en una mayor claridad mental, reducción del estrés y equilibrio emocional, transformando la vida diaria en una experiencia más consciente y plena.
PERRO, MARIPOSA, COBRA, ÁRBOL, Ommmmmm.
La riqueza de āsanas en yoga abarca una amplia variedad, desde posturas básicas hasta poses más avanzadas. Algunas ya muy conocidas popularmente: postura del perro mirando hacia abajo, postura del árbol, de la cobra, de la mariposa, del puente y cantidad más. “Si a un niño le dicen ‘Muéstrame cómo haces yoga’ muy probablemente haga alguna de estas posturas o se siente en loto y cante el OM,” sostiene Mariel.
“Las 84 āsanas clásicas son consideradas fundamentales para el desarrollo integral del cuerpo y la mente. Y hay cientos de posturas más. Estas se diseñaron para trabajar en diferentes aspectos, como fuerza, flexibilidad, equilibrio y concentración. Cada āsana tiene sus propios beneficios físicos y mentales, y se pueden adaptar a diversas habilidades y necesidades,” agrega la especialista.
TN: ¿Cuáles son tus posturas favoritas?
MM: Mis posturas favoritas son aquellas que menos me gustan practicar y más incómodas emocionalmente me resultan. Puede parecer un poco extraña mi respuesta aunque tiene un por qué. Por un lado porque estas posturas que inicialmente no me resultan agradables me presentan un desafío personal y agradezco el crecimiento y la superación que experimento al practicarlas. Muchas de las cosas que ahora nos resultan fácil en algún momento fueron difíciles.
Por otro lado, valoro mucho la diversidad en mi práctica de yoga. Me permite conocerme más a mí misma. Si una postura no me gusta es porque, por ejemplo, me hace sentir poco flexible o torpe, o porque me expone a mis debilidades y a mis miedos, porque me muestra mis limitaciones, me mueve emociones “incómodas” o simplemente me muestra algo sobre mí misma que no quiero ver. En lo que solemos rechazar o negar podemos encontrar una gran oportunidad de aprendizaje, de aceptación de “lo que es”, de apertura mental y autoconocimiento.
Al tratar con personas con depresión, ansiedad o estrés, Mariel resalta “la importancia de enfatizar la empatía, brindando contención, alivio y acompañamiento, acercándose al alumno desde una palabra compasiva y amorosa si siente que lo necesita guiándolos a reencontrar la alegría y la fuerza interior, brindando herramientas para encontrar su propósito de vida.”
“Es importante ser muy claro en que si bien el yoga brinda un apoyo muy positivo al bienestar emocional, nunca sustituye una terapia ni el asesoramiento médico”, agrega.
TN: ¿Se debe acompañar el yoga con un cambio de hábitos y terapia?
MM: En realidad los cambios de hábitos se van dando natural y orgánicamente como consecuencia de la práctica del yoga. Desde los hábitos alimenticios o de sueño hasta la forma de relacionarnos con nosotros mismos, con los otros, con el entorno. Respecto de la terapia, el yoga no sustituye una terapia ni tampoco la consulta médica, solo la acompaña y la complementa.
Mariel nos cuenta que hace 23 años que está enseñando yoga en Tamarindo. Tiene estudios profundos en biomecánica, filosofía del yoga y un máster en Yoga Terapéutico además de una gran experiencia en pedagogía.
“Siempre he sentido una vocación muy clara por la docencia. Además de maestra de Yoga soy profesora de matemática y he trabajado en colegios secundarios y en la universidad por casi 20 años”.
TN. ¿Cuáles son las coincidencias entre la matemática y el yoga?
MM. “Ambas te hacen libre. Por ejemplo, cuando guiaba a un alumno en el proceso de aprender matemática podía observar cómo pasaba de la frustración, la confusión y la falta de motivación a la claridad, la confianza, el empoderamiento y el alivio.
En las clases de yoga, casi siempre sucede algo similar. A veces, el alumno llega apesadumbrado, o con estrés, o con tensión o dolor y a medida que va transcurriendo la clase, su rostro se suaviza y se relaja, la mente se aclara y se calma, el corazón se abre, la sonrisa aparece. Me da profunda alegría ser un canal de energía contribuyendo de algún modo a que esa transformación suceda.
Comencé dando clases gratuitas al aire libre y motivada por mis estudiantes, decidí abrir mi propia escuela de Yoga”, sostiene. Así nació Ser Om Shanti Yoga Studio que este año cumple 18 años de estar funcionando en Tamarindo.
TN: ¿A quiénes están orientadas tus clases y qué estilos ofrecen?
MM: A todos. Yoga es para todos. Alumnos de diferentes niveles, edades y condición física, desde principiantes hasta instructores, deportistas, futuras mamás, personas recuperándose de lesiones, otras bajo estrés y ansiedad. Todos son bienvenidos.
Ofrecemos clases en variedad de horarios, estilos e intensidad: Hatha Yoga, Vinyasa, Power Yoga, Yin, Yoga Terapéutico, meditación, pilates y una clase que amo enseñar y que llamo Master Yoga Class. También ofrece clases al aire libre en un jardín hermoso frente al mar. Además talleres, seminarios y clases especiales con profesores invitados.
TN: ¿Quisieras compartirnos una última reflexión?
MM. Mi objetivo como maestra es inspirar a mis alumnos a desarrollar su máximo potencial y permitirse SER, ser quien realmente son. De allí el slogan que acompaña a Ser Om Shanti: LET’S GO DEEPER. LET’S GO HIGHER. Me siento profundamente agradecida y honrada por la posibilidad de hacer aquello que amo y por el amor que recibo de cada uno de los alumnos que llegan a las clases. Cada uno de ellos es un regalo, una fuente de inspiración y crecimiento. Namasté.
Para más información, visitar www.seromshantiyoga.com
YOGA, A GREAT ALLY FOR HEALTH AND WELLNESS
We talked to Mariel Andrea Marmorato, owner and head teacher of Ser Om Shanti Yoga Studio in Tamarindo, who explains the benefits of this ancient practice and why it is so important for life.
BY SEBASTIAN MUZI
Tamarindo is beach, sunset, party nights and a melting pot of cultures that enriches the city. Tamarindo is also spiritual, with yoga classes, retreats and holistic therapies abounding.
This includes Ser Om Shanti Yoga Studio, a space to relax, find peace, harmony and personal development. It is headed by Yoga teacher Mariel Andrea Marmorato who has quite a special story.
Her resume does not begin by listing the number of jobs or the dozens of studies she has done in this discipline.
“My first steps in yoga were 29 years ago, at a time in my life when I was not well and felt a very vivid need to find myself again. My beginnings were not motivated by the search for more flexibility or relief from mental stress or physical tensions. I approached yoga looking to alleviate the emotional pain I felt and thus recover the joy and meaning of my life”, says to The Tamarindo News the Argentinean teacher, who arrived in Costa Rica 23 years ago and today specializes in teaching different styles of Yoga from a functional and therapeutic perspective.
Yoga is union. In the context of yoga, this union refers to the integrated connection between body, mind and spirit. The practice seeks to harmonize these aspects of human existence to promote well-being and self-awareness through physical, breathing and meditation practices.
More and more people of all ages and physical condition are practicing yoga. There are many styles and intensities, it is just a matter of trying to find the one that best suits what we want and need.
“One day, a friend invited me to go with her to a yoga class. I was not very convinced, the proposal sounded quite boring to me. I liked intense training, weights, aerobics. Besides, my body was not very flexible, I trained a lot, I stretched very little. The idea of suffering with stretching discouraged me,” says Mariel.
But her friend told her to forget about the physical for a moment, that yoga would help her to calm her mind and make room for her heart to speak. “I don’t know why, but her words resonated and I decided to do the experience. Since then, yoga has been my way of life and I discovered something that has become a truth for me: inner peace is the foundation of happiness,” she adds.
The Tamarindo News (TN): What are the impacts of the practice of yoga on health?
Mariel Marmorato (MM): The benefits are really many, both physically, mentally and emotionally (see separate article). In addition to the most obvious ones, there are other more subtle and profound benefits that come “as an added bonus. The practice of yoga increases our capacity for introspection and self-knowledge, acceptance of ourselves, acceptance of “what is”. We live pulled towards the outside, identified with what we do and with what is expected of us. Consistency in the practice of yoga accompanies us to return to ourselves, to a state of peace, presence, joy, inner wisdom, compassion, balance, transformation and the list goes on. All of this boosts the immune system and translates into health. No small thing at a time when a high percentage of human beings including children and adolescents have a low tolerance for frustration and a great need for instant gratification.
TN: So, there is a broader perspective of what it is to practice this discipline?
MM: Exactly. Just doing yoga postures is not yoga. The execution of physical postures in tune with conscious breathing is a small part of what yoga is, the tip of a big iceberg. Yoga is a state of consciousness and a way of living and seeing life. This is very interesting: for example, when your actions are in accordance with your thinking and feeling, when you do what you do while being present, with joy and without harm, letting go of what you no longer need, you are also doing yoga. To do yoga is to live with altruism, commitment and responsibility, from love and a compassionate attitude, without harming or hurting yourself, without victimizing yourself, feeling that you are co-creator of your reality, in full presence and in resonance with your being, seeking not only your happiness but that of all beings.
TN: How long does it take to see results?
MM: It varies from person to person, it depends on the frequency with which you practice, the constancy and the attitude. Mental benefits such as stress reduction, greater body awareness and a general feeling of relaxation and inner peace can be noticed more quickly, even from the first session. Improvements in flexibility, mobility and strength after a few weeks of regular practice. Consistency and discipline are key to experiencing change.
THE ĀSANAS FACILITATE DEEP SELF-KNOWLEDGE
The conventional perception of yoga is often limited to the physical forms of the postures (āsanas), overlooking its true essence.
The Sanskrit term āsana comes from Patanjali’s Yoga Sutras, a classic book of yoga philosophy, where the āsana is described as a stable and comfortable posture accompanied by mindful breathing. There is a profound relationship between postures and the vital energy that nourishes us (prana).
Beyond the physical postures, yoga is a philosophy that seeks the integral connection between body, mind and spirit. The āsanas are tools that facilitate deep self-knowledge by focusing on breathing and introspection. This practice goes beyond the physical, offering significant mental and emotional benefits. Mindfulness cultivated during meditation and āsana practice translates into greater mental clarity, stress reduction and emotional balance, transforming daily life into a more mindful and fulfilling experience.
DOG, BUTTERFLY, COBRA, TREE, Ommmmmmmm.
The wealth of āsanas in yoga encompasses a wide variety, from basic postures to more advanced poses. Some already very popularly known: downward facing dog pose, tree pose, cobra pose, butterfly pose, bridge pose and number more. “If a child is told ‘Show me how you do yoga’ he or she will most likely do one of these postures or sit in lotus and chant OM,” Mariel says.
“The 84 classical āsanas are considered fundamental to the holistic development of the body and mind. And there are hundreds more postures. These are designed to work on different aspects, such as strength, flexibility, balance and concentration. Each āsana has its own physical and mental benefits, and can be adapted to various abilities and needs,” adds the specialist.
TN: What are your favorite postures?
MM: My favorite postures are the ones I like to practice the least and the most emotionally uncomfortable for me. My answer may seem a little strange, but there is a reason for it. On the one hand because these postures that are initially not pleasant to me present me with a personal challenge and I appreciate the growth and improvement that I experience when practicing them. Many of the things that are easy for us now were once difficult.
On the other hand, I really value the diversity in my yoga practice. It allows me to get to know myself better. If I don’t like a posture, it is because, for example, it makes me feel inflexible or awkward, or because it exposes my weaknesses and fears, because it shows me my limitations, moves me “uncomfortable” emotions or simply shows me something about myself that I don’t want to see. In what we usually reject or deny we can find a great opportunity for learning, for acceptance of “what is”, for open-mindedness and self-knowledge.
When dealing with people with depression, anxiety or stress, Mariel highlights “the importance of emphasizing empathy, providing containment, relief and accompaniment, approaching the student from a compassionate and loving word if they feel they need it guiding them to rediscover joy and inner strength, providing tools to find their life purpose.”
“It is important to be very clear that while yoga provides very positive support for emotional well-being, it is never a substitute for therapy or medical advice,” she adds.
TN: Should yoga be accompanied by a change of habits and therapy?
MM: Actually, changes in habits occur naturally and organically as a consequence of the practice of yoga. From eating or sleeping habits to the way we relate to ourselves, to others, to the environment. Regarding therapy, yoga does not replace therapy or medical consultation, it only accompanies and complements it.
Mariel tells us that she has been teaching yoga in Tamarindo for 23 years. She has deep studies in biomechanics, yoga philosophy and a master’s degree in Yoga Therapy in addition to a great experience in pedagogy.
“I have always felt a very clear vocation for teaching. In addition to being a Yoga teacher, I am a math teacher and I have worked in high schools and at the university for almost 20 years”.
TN. What are the coincidences between mathematics and yoga?
MM. Both make you free. For example, when guiding a student through the process of learning math I could watch them move from frustration, confusion and lack of motivation to clarity, confidence, empowerment and relief.
In yoga classes, something similar almost always happens. Sometimes, the student comes in grief-stricken, or stressed, or in tension or pain and as the class goes on, their face softens and relaxes, the mind clears and calms, the heart opens, the smile appears. It gives me deep joy to be a channel of energy contributing in some way to make that transformation happen.
I started giving free outdoor classes and motivated by my students, I decided to open my own yoga school,” she says. Thus, was born Ser Om Shanti Yoga Studio, which this year celebrates 18 years of operation in Tamarindo.
TN: Who are your classes for and what styles do you offer?
MM: Everyone. yoga is for everyone. Students of different levels, ages and physical condition, from beginners to instructors, athletes, moms-to-be, people recovering from injuries, others under stress and anxiety. All are welcome.
We offer classes in a variety of schedules, styles and intensity: Hatha Yoga, Vinyasa, Power Yoga, Yin, Therapeutic Yoga, Meditation, Pilates and a class I love to teach that I call Master Yoga Class. She also offers outdoor classes in a beautiful garden in front of the sea. Plus, workshops, seminars and special classes with guest teachers.
TN: Would you like to share one last thought with us?
MM. My goal as a teacher is to inspire my students to develop their full potential and allow themselves to BE, to be who they really are. Hence the slogan that accompanies Ser Om Shanti: LET’S GO DEEPER. LET’S GO HIGHER. I feel deeply grateful and honored for the possibility of doing what I love and for the love I receive from each and every student who comes to class. Each one of them is a gift, a source of inspiration and growth. Namaste.
For more information, visit www.seromshantiyoga.com